Para todos los que vivimos en mi cálida ciudad, el otoño es una estación que pasa desapercibida y cómo no, si aún rondamos los 43 °C pero como me encanta la decoración de otoño y deseo que se sienta un cambio en nuestra casita de la esquina, estoy empezando a incorporar pequeños detalles otoñales.
Les muestro, tal vez no pareciera mucho pero para mí ya se respira otro aire.
En nuestra barrita-comedor, coloqué algunas piñas dentro de mi copa de martini gigante, además de esa vela que huele exquisito a pudin de caramelo y es de un café obscuro que hace juego con las piñas, el mantelito debajo de la copa ya lo tenía y queda genial porque sus colores y estampado reflejan la transición que estamos viviendo entre verano y otoño.
Me encanta esta foto, ya que la luz de la mañana observa diferente en nuestra casita y las piñas se resaltan en sus formas; estas las conseguí en un centro comercial hace unas semanas que fuimos a un concierto y lo mejor de todo es que fueron gratis, ya que estaban tiradas por todo el lugar ;-).
Arriba les comentaba que aún estamos a altas temperaturas pero puedo decir que desde hace tiempo veo que ya está cambiando nuestro clima, refresca más y nuestro sol se esconde más rápido, además hoy oficialmente comienza el otoño. Así que sólo me queda más que decir que:
¡Bienvenido Otoño!
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